El Barça vence 2-4 en Málaga y se clasifica para las semifinales de Copa, donde espera el Madrid
La eliminatoria no se ha resuelto hasta el minuto 75, cuando Iniesta ha firmado el 2-3 que dictaba sentencia.
La fiabilidad se llama Barça. Siempre que hay noche grande de fútbol, el equipo azulgrana responde con espectáculo y goles. Es lo que ha hecho este jueves en Málaga, donde se ha impuesto por 2-4 gracias a los goles de Pedro, Piqué, Iniesta y Messi, después de haber visto como el Málaga igualaba hasta dos veces el partido y dejaba la eliminatoria a punto de una prórroga que se ha evitado con las dos últimas dianas en el último cuarto de hora de partido.
De esta manera, una vez superada una eliminatoria más que vibrante, al FC Barcelona le espera una que aún suena más atractiva: Madrid-Barça, a partir del próximo miércoles (21 horas), con la ida en el Santiago Bernabéu.
Rápido intercambio de golpes
La decisiva vuelta de Copa no ha dado tregua ni en los minutos iniciales. El FC Barcelona, consciente de su necesidad de marcar, ha hecho el primer gol en el minuto 8, en una definición que ha recordado mucho a la de la segunda diana vivida en Anoeta hace pocos días. Alves, que había sido asistido por Xavi, ha dado el gol medio hecho a Pedro, que clasificaba momentáneamente a los de Roura.
La respuesta local no se ha hecho esperar y Joaquín, desde la frontal, ha batido a Pinto con un tiro raso y ajustado al palo. Al inicio de la jugada, los jugadores azulgranas han reclamado unas manos de Seba que el árbitro no ha visto. Antes del cuarto de hora, 1-1, un resultado que volvía a servir el Málaga pero que, desde óptica azulgrana, era mejor que el 0-0 inicial.
Resbalones y amarillas
El partido no se podría explicar sin hablar del estado del terreno de juego, que ha provocado numerosos resbalones y caídas, sobre todo durante toda la primera mitad. Al Barça se le hacía muy difícil poner en práctica su juego de posesión habitual. El estado deficiente del césped complicaba los controles y la precisión en los pases. Este fútbol, ya de por sí poco fluido, se ha visto aún más perjudicado por las continuas interrupciones locales. De hecho, Iturra podría haber sido expulsado en el minuto 19 y se han visto hasta seis amarillas en todo el primer tiempo.
Piqué estreno paternidad con gol
Como ha ocurrido en el primer tiempo, el FC Barcelona ha salido al campo enchufadísimo tras la reanudación. Piqué ha rematado a gol un brillante centro de Iniesta y ha estrenado su reciente paternidad con un gol que valía su peso en oro. La diana ha dejado grogui al Málaga, que ha sufrido por no encajar el 1-3 y que se ha encontrado milagrosamente con el 2-2, obra de Santa Cruz en un contragolpe iniciado con un pisotón de Weligton sobre Cesc en el área malaguista. El partido se precipitaba a la prórroga. Así es la Copa.
Iniesta y Messi guían al equipo a semis
Nada ha cambiado en el juego azulgrana. El 2-2 ha sido un estímulo más, el enésimo reto para un equipo acostumbrado a responder cuando toca. Con un fútbol de salón a pesar del pésimo estado del campo, Cesc e Iniesta se han asociado muy bien en la frontal para que el manchego hiciera el 2-3 en el minuto 75. La eliminatoria se decantaba, ahora sí, de forma clara para el FC Barcelona. Minutos más tarde, Alves ha vuelto a regalar una asistencia de gol, esta vez a Messi, que no ha perdonado con la cabeza. Era el 2-4 y el acceso a semifinales. Una doble ración de Clásicos está servida. Y estos no fallan.
De esta manera, una vez superada una eliminatoria más que vibrante, al FC Barcelona le espera una que aún suena más atractiva: Madrid-Barça, a partir del próximo miércoles (21 horas), con la ida en el Santiago Bernabéu.
Rápido intercambio de golpes
La decisiva vuelta de Copa no ha dado tregua ni en los minutos iniciales. El FC Barcelona, consciente de su necesidad de marcar, ha hecho el primer gol en el minuto 8, en una definición que ha recordado mucho a la de la segunda diana vivida en Anoeta hace pocos días. Alves, que había sido asistido por Xavi, ha dado el gol medio hecho a Pedro, que clasificaba momentáneamente a los de Roura.
La respuesta local no se ha hecho esperar y Joaquín, desde la frontal, ha batido a Pinto con un tiro raso y ajustado al palo. Al inicio de la jugada, los jugadores azulgranas han reclamado unas manos de Seba que el árbitro no ha visto. Antes del cuarto de hora, 1-1, un resultado que volvía a servir el Málaga pero que, desde óptica azulgrana, era mejor que el 0-0 inicial.
Resbalones y amarillas
El partido no se podría explicar sin hablar del estado del terreno de juego, que ha provocado numerosos resbalones y caídas, sobre todo durante toda la primera mitad. Al Barça se le hacía muy difícil poner en práctica su juego de posesión habitual. El estado deficiente del césped complicaba los controles y la precisión en los pases. Este fútbol, ya de por sí poco fluido, se ha visto aún más perjudicado por las continuas interrupciones locales. De hecho, Iturra podría haber sido expulsado en el minuto 19 y se han visto hasta seis amarillas en todo el primer tiempo.
Piqué estreno paternidad con gol
Como ha ocurrido en el primer tiempo, el FC Barcelona ha salido al campo enchufadísimo tras la reanudación. Piqué ha rematado a gol un brillante centro de Iniesta y ha estrenado su reciente paternidad con un gol que valía su peso en oro. La diana ha dejado grogui al Málaga, que ha sufrido por no encajar el 1-3 y que se ha encontrado milagrosamente con el 2-2, obra de Santa Cruz en un contragolpe iniciado con un pisotón de Weligton sobre Cesc en el área malaguista. El partido se precipitaba a la prórroga. Así es la Copa.
Iniesta y Messi guían al equipo a semis
Nada ha cambiado en el juego azulgrana. El 2-2 ha sido un estímulo más, el enésimo reto para un equipo acostumbrado a responder cuando toca. Con un fútbol de salón a pesar del pésimo estado del campo, Cesc e Iniesta se han asociado muy bien en la frontal para que el manchego hiciera el 2-3 en el minuto 75. La eliminatoria se decantaba, ahora sí, de forma clara para el FC Barcelona. Minutos más tarde, Alves ha vuelto a regalar una asistencia de gol, esta vez a Messi, que no ha perdonado con la cabeza. Era el 2-4 y el acceso a semifinales. Una doble ración de Clásicos está servida. Y estos no fallan.
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