El equipo empata a cero en San Siro en un partido de ritmo frenético y el estadio del Barça decidirá el semifinalista
Los italianos se han cerrado durante buena parte del primer tiempo y en los instantes finales.
Susto tempranero
A pesar del marcado color azulgrana del primer tiempo, el Milan ha tenido una mejor entrada de partido y se habría podido adelantar apenas en el minuto 2, tras una recuperación gracias a su presión adelantada, pero Robinho ha perdonado. El genio de Messi despertaría al vigente campeón, que tardaría diez minutos en empezar a sentirse cómodo en el maltrecho césped del Giuseppe Meazza. Sus ataques se alargaban y ya intimidaban a Abbiati. En el minuto 15, el portero del Milan ha cometido un claro penalti sobre Alexis, no pitado.
Cerrando al contrario en su área
El Barça intentaba hacerse con el control mientras que el Milan se defendía e intentaba replicar con rápidos y peligrosos contragolpes. Con muy poco les bastaba a los locales. Así, en el minuto 19, Valdés salvaba el gol de Ibrahimovic, bien cubierto en todo momento. El duelo estaba precioso, con un ritmo elevadísimo y por instantes descontrolado. Justo lo que no pretendía el Barça.
Llevaban la iniciativa los catalanes. Su cerebro, Xavi, ha culminado una acción colectiva con un disparo similar al del 2-3 de la fase de grupos, aunque esta vez Abbiati lo ha podido desviar. Murmuraba San Siro cada vez que el conjunto azulgrana se aproximaba a su área, poblada de defensores. Y cada vez lo hacía con mayor solvencia. Generaba ocasiones, sólo le faltaba instinto asesino ante un rival atrincherado, ultraconservador.
Equilibrio de fuerzas y menos vistosidad
La entrada de El Shaarawy por Robinho en la reanudación ha oxigenado al Milan, más ambicioso en este periodo. De todos modos, la línea defensiva de cuatro hombres del Barça se mostraba impecable. La intensidad seguía siendo máxima, siendo menos vistoso el fútbol y la posesión más equilibrada. En busca de la profundidad perdida, Guardiola introduciría Tello en el lugar de Iniesta (min 64).
Asedio final
Con él en la izquierda, el equipo recobraría la verticalidad en el sprint final. En el minuto 77, el disparo de Messi lo ha podido rechazar la defensa local y, en el córner siguiente, Puyol ha cabeceado demasiado cruzado mientras recibía el segundo penalti no señalado de la noche. Era difícil desarticular el entramado defensivo de Allegri. Porque el Milan ha vuelto retrasar líneas, dando por bueno el resultado. Una doble oportunidad de Messi y Alves y un nuevo posible penalti al argentino, a continuación, habrían podido trastocar los planes de los italianos. Sin goles en la ida, decidirá Camp Nou.
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