Dos goles de bandera de Xavi y Messi en una primera parte para enmarcar permiten al Barça superar al Sevilla a domicilio y rearmar su estado de ánimo.
Dominio y gol de Xavi
No ha habido debate. El Barça ha aparecido dominador, brillante y vertical ante un Sevilla con un once con muchos hombres de vocación ofensiva. Sin embargo, tenían que estar cerrados en su territorio. La superioridad numérica y técnica culé en el centro del campo era evidente y decisiva: Xavi y Cesc jugaban a placer. Y cuando esto sucede es un buen síntoma. Sería el '6' el encargado de inaugurar el marcador con una ejecución magistral de una falta. La ha chutado desde el vértice del área y el portero Palop ha reaccionado tarde.
Obra de arte de Messi
El Barça estaba llegando con facilidad. De hecho, justo después de la diana de Xavi, Iniesta se ha plantado ante el portero, pero disparó fuera. Se estaba cociendo el que sería el gol de la noche e indiscutiblemente uno de los más preciosos de la temporada. En el minuto 25, Messi ha cogido el balón en la medular, ha tirado una pared con Iniesta, se ha deshecho de Spahic con un túnel y ha batido a Palop con una vaselina angelical que entraría por la escuadra. Exquisito.
Se abre el partido con 0 - 2
Un cabezazo de Del Moral, fruto de una imprecisión entre Piqué y Valdés, resucitaría al Sevilla. Por unos instantes, los hombres de Míchel se han expulsado de encima el control barcelonista y el partido se ha abierto. Los porteros adquirirían protagonismo. En el minuto 39, Palop neutralizaba una sensacional acción personal de Pedro y acto seguido Valdés ha evitado un autogol de Adriano, forzado por Kanouté. El portero de los andaluces ha mantenido con vida a los suyos salvando un uno contra uno Cesc cuando se consumía el primer tiempo.
Respuesta sevillista
El Sevilla no se rendiría y ha salido en la reanudación más intenso, con la intención de volver al partido. Dos centros consecutivos desde la derecha de los andaluces y un penalti reclamado por Reyes, en el minuto 48, lo dejaban patente. Ahora, el Barça no podía combinar con tanta comodidad. Tardaría un cuarto de hora en llevar el encuentro al terreno que más le convenía. El de su monólogo atacante. De todos modos, Del Moral ha dispuesto de una buena opción en un buen centro de Navas que remató desviado (min 65). A diferencia del acto anterior, las oportunidades escaseaban.
Séptima victoria consecutiva
Una asociación diabólica entre Messi e Iniesta sí ha estado a punto de ser provechosa. El '8' se ha plantado solo ante Palop, le ha sentado con una finta y su disparo se ha perdido rozando el palo. En las postrimerías, Guardiola ha hecho reaparecer a Alexis y ha dotado de más consistencia al equipo introduciendo a Keita y Puyol. La amenaza sevillista, casi siempre desde los lados, se esfumaba. Estaría más cerca el 0-3 que el 1-2. Si no ha llegado ha sido por culpa de Palop. Gran Barça y séptima victoria consecutiva.
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